Estamos con ustedes”, con este mensaje el vicepresidente Mike Pence se dirigió a la comunidad de migrantes venezolanos en Miami para señalar que en Venezuela “no es hora del diálogo, es hora de acción” y reiterar el apoyo de EE.UU. en la lucha por “la libertad” y la “democracia” en el país sudamericano.
En la Iglesia Doral Jesus Worship Center, en Doral, Pence primero se reunió con un grupo de congresistas y con un grupo de la diáspora venezolana para luego salir a dirigir algunas palabras a un grupo más grande que lo esperaba en el auditorio.
Entre los invitados estuvieron el médico venezolano Rafael Gottenger, el ex preso político Raúl Díaz Peña, el ex legislador Pedro Mena y Francis Salinas y su esposo José Ravangouy.
“Estos líderes se reúnen aquí y este presidente de nuestra administración va a continuar al lado de ustedes hasta que el sufrimiento se acabe y regrese la libertad”, aseguró el vicepresidente al salir de la reunión privada.
Ya en el podio, aseguró que “EE.UU. se siente orgulloso de estar al lado del pueblo venezolano” y afirmó que el presidente Donald Trump pidió que viajara a Miami para mostrar el compromiso inquebrantable de EE.UU. con el pueblo venezolano.
Recordó que al igual que ellos, otros 20 países reconocen a Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional, como presidente encargado del país desde el pasado 23 de enero.
Sin embargo, aseguró que eso no era suficiente y pidió al resto de la comunidad internacional que se una en el reconocimiento de Guaidó. “No es hora del diálogo, es hora de acción”, señaló, agregando que “ha llegado el momento de terminar la dictadura de Maduro de una vez por todas”.
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