BARAHONA. Residentes de los sectores de la parte alta de esta ciudad han denunciado este jueves su irritación por las restricciones en el suministro eléctrico de la Empresa de Distribuidora de Electricidad del Sur (EDESUR).
Para los pobladores de Los Guandules, Palmarito, El Cacique, La Raqueta y Camboya, creen que les ha caído un mal y están pagando la maldición de vivir a oscuras todas las noches.
De acuerdo con el dirigente comunitario, Frank Florián, en este país los pobres son “hijos de lo malo” porque son desamparados y no tienen dolientes, a razón, de que EDESUR los castiga con extensos apagones.
Estimó que allí los estudiantes, herreros, ebanistas, torneros, artesanos y soldadores que requieren diariamente de electricidad son limitados a realizar sus faenas cotidianas tras las restricciones eléctricas.
Dijo que la delincuencia tiende a sentirse con más vigor en horas nocturnas, debido a que la oscuridad es el mejor aliado a los atracadores y ladrones porque se desplazan a sus anchas ante la impunidad de las autoridades.
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